
Es peligroso esto de levantarse a la hora de comer, tras una larga noche de estudio (aunque no os lo creáis estudio) (Juanan sí me cree) (ja!) (lo dice para consolarme) (al grano) y dudas de alto nivel (acompasadas con cambios de humores).
El caso es que ya me veía levantado cuando le da a Juanete por llamarme. Resulta que se va a pasar por la juniversidad a las 5.30 (curiosamente en la hora que tengo libre...). Así que, tras programación (donde me doy cuenta de que mi profesor sabe incluso menos que yo, lo cual es digno de mención), veo el careto siempre felíz de Juan (que hoy ha podido decir PM diox sabe la de veces). Decidimos ir al bar (como no), más que nada para pasar el rato. Atajamos por la facultad de Juanete y... ¡Allí está Juanan! Tiene hora libre al igual que yo. Así que los bOqUE nos vamos a tomar unas cervezuelas... Pero Juanan nos hace entrar en razón "¿cerveza a las 5 de la tarde, no? ¡bien!", así que Juan opta por una leche manchada, yo por un con leche (soy un tipo duro) y Juanan por un trozo de aire.
Acompañamos a Juanan a su clase, debatiendo sobre Juan y sus "operaciones en días festivos" hasta que a Juanan le llega la hora (de irse, xD). Juan nos desvela el secreto de por qué habla con el acento raro-raro-raro. El tema es que me toca a mí también ir a clase. Física es física (homenaje al Ramos). Juan no se quiere despedir y nos reunimos con Mochón que, en un nuevo intento por "hacer como que estudia", aguarda en la cola de la fotocopiadora. Juan y yo de ruta turística. La Cascanueces se retrasa y nosotros en plan tertulia... Pasados 20 minutos todos abandonamos gustosos el local. ¿Que dónde fuimos? ¡Está claro! Juan y yo coca-cola, Mochón unos bits.
Aquí todavía no había empezado a llover, pero hacía un viento que volaba hasta el último de los peluquines.
Moco se despide de nosotros entre lágrimas (lo comprendemos), no sin antes dedicarnos un "¡os quiero! ¡no cambiéis nunca!". Fuimos en busca de Juanan, que salía a las 8.30. Nos lo encontramos tras nuestra tertulia de banco entre webmasters. Aquí viene el grandioso detalle de Juan... A estas alturas está lloviendo (poca cosa, de esa que te jode sin tú saberlo) y con el viento ese de mil demonios... ¡Juan pasa de acercarnos a los cines! En su lugar nos da un paraguas putrefacto... La imagen: Juanan y yo caminando bajo la lluvia, mientras él me agarra de la cintura. Algún día confesaremos lo nuestro.
Dudamos seriamente sobre lo mío con el carnet de conducir, confiamos en el efecto lentillas, nos cagamos en la serie esa del "Cooper" y llegamos a los cines a duras penes, comprando así nuestras entradas para el "Encuentros con directores" del jueves (que por cierto esta vez son sólo actores, pero vaya dos). 1.50 € por verle las barbas al Tosar... Esperemos que esté de buen humor. Nos da miedo.
El caso es que me toca ir a casa a patita, nunca entenderé lo mío con los autobuses... El paraguas solo resiste unos 20 metros más antes de partirse (¡un abrazo, Juan!), así que tengo que doblarlo y desplazarme a pecho descubierto... Llego empapado (que no empalmado).
A fin de cuentas, una manera más de pasar el día: estudiando, tomando cafeses, cocacoleando y rompiendo paraguas (que es lo mío)... Y todo para tener algo que contar a los fans... Me tengo el cielo ganado (ya se ve con tanta puta lluvia).
Un abrazo, muchachos/as.